domingo, 7 de junio de 2009

cafe fermentado

y ya es lunes.
Siempre espera sentado sobre las escalerias de la entrada, esper y espera. Ha veces en que recuesta su cabeza para ver a as nubes paseando por el cielo. Desvia los ojos hacia una ventana, no pasa nada. En la noche es sorpresiva la presencia de mi cuerpo sobre el piso marròn que barro a diario. La vez que encontre un pasador, hasta ese instante, fue todo para mì.
Y una mosca vuela hacia distintas direcciònes. Què setirà? El hueco en el vacìo?
Este olor penetra mi narìz y comienza a disgustarme el instante de respirar.
Suena la llave y los pasos.

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