por subidas curveadas pase hoy, entre el cielo y sobre banqueta. a la ciudad el frio llegó, y neblina la tapo. ahora la luna sonríe, anaranjada saluda y descanza.
estoy comiendo una manzana deliciosa, jugosa que disfrute demasiado entre el cerrito viendo las nubes sobre las motañas y unos cuantos gallos se reflejaban en el charco que la lluvia habia creado al caer en el piso.
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